Guía de lectura La compañía de las moscas C ésar Mallorquí El colegio Anna Frank parecía un centro tranquilo, sumido en su rutina escolar, hasta que un suceso sangriento le llevó a ocupar las primeras páginas de los periódicos. COMPAÑIA DE LAS MOSCAS, LA, MALLORQUI CESAR, $ Ésta es la historia de tres personajes: Daniel Castro, Julián Echavarría y Raúl Jordán. El primero, un ch. · “La compañía de las moscas” de César Mallorquí, lo compré en una librería de libros usados, sólo vi el título y leí un poco de lo que trataba y me llamó la atención, así que decidí comprarlo. Me costó 40 pesos, y la verdad no esperaba nada de él, pero terminó por gustarme mucho.
LA COMPAÑÍA DE LAS MOSCAS MALLORQUÍ, CÉSAR. Nota media 8,83 Muy bueno. LA ISLA DE BOWEN MALLORQUÍ, CÉSAR. Vista previa 1 crítica LEONÍS MALLORQUÍ, CÉSAR. Vista previa 2 críticas LA ESTRATEGIA DEL PA MALLORQUÍ, CÉSAR. La compañía de las moscas, de César Mallorquí. Tipo de Archivo: PDF El último trabajo del Señor Luna, Edebé, La cruz de El Dorado. Edebé, La catedral, Premio Gran Angular, SM, Las lágrimas de Shiva, Premio La compañía de las moscas, de César Mallorquí. La compañia de las moscas. Páginas: 3 ( palabras) Publicado: 11 de abril de Bibliografía: La compañía de las moscas. Cesar Mallorquí. La compañía de las moscas. Resumen. Este es un libro el cual te narra la historia de 3 personajes,Daniel Castro, Julián Echevarría y Raúl Jordán. En este libro te narran los hechos de manera.
La compañía de las moscas / César Mallorquí / Alfaguara / / / Notable alto / César Mallorquí nació en Barcelona, en Dada la profesión de su padre, José Mallorquí, el creador de El Coyote, su afición por la literatura germinó ya en la infancia y muy pronto publicó su primer relato en una revista. César Mallorquí (Barcelona, ) estudió Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid y colaboró, entre otras publicaciones, en la famosa revista La Codorniz. A comienzos de los años noventa decidió dedicarse a lo que siempre fue su vocación: la literatura. El periodista llegó a la cafetería a las seis y cuarto de la tarde. En realidad, había quedado citado a las seis, pero a causa de las fiestas navideñas el centro de la ciudad estaba totalmente colapsado. Jaime -así se llamaba el periodista- entró en la cafetería y miró en derredor.
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